miércoles, 29 de octubre de 2008

¿Quién bebe más, un alemán o un boyaco?

Los alemanes dicen ser los más cerveceros, pero los del Altiplano no se quedan atrás. En el marco de ExpoAlemania, SoHo se propuso salir de la duda mediante una competencia de alto contenido etílico.




LOS COMPETIDORES

Por Alemania: Hans Jürgen Bürgl
29 años
57 kilos de peso
1,72 de estatura
Comida preferida: CurryWürst
Récord cervecero: 45 cervezas colombianas

Por Colombia: Raúl Marín
39 años
75 kilos de peso
1,80 de estatura
Comida preferida: Chunchullo
Récord cervecero: 50 cervezas colombianas. No había probado la cerveza alemana.

Lugar: Rock Garden Pub

Prueba: Tomar la mayor cantidad de cerveza Erdinger en cuatro horas?



- La primera cerveza se sirvió a las 3:30 p.m. en punto, y la última a las 7:30 p.m.

- Raúl se levantó al baño cuatro veces durante la competencia: a las 4:03 p.m., 4:50 p.m., 5:41 p.m. y a las 6:08 p.m.

- Hans se levantó al baño también cuatro veces: a las 4:18 p.m., 4:53 p.m., 5:38 p.m. y 6:23 p.m.

- Hans fue el único que pidió comida: papas fritas, a las 5:17 p.m.

- Cada uno se tomó 4 litros de cerveza Erdinger Weissbier, de 5,3% de alcohol, al término de la hora preestablecida.

- A las 7:00 p.m. se realizaron dos pruebas de equilibrio y sobriedad:?



1) Caminar en línea recta del punto A al B:
- Raúl se demoró 7,18 segundos

- Hans se demoró 7,56 segundos



2) Hacer el cuatro:
- Hans hizo el cuatro durante 18,32 segundos

- Raúl hizo el cuatro durante 2,53 segundos?



- Como seguían empatados, se decidió hacer un desempate con cerveza Erdinger Pikantus de 7,3% de alcohol que debía ser tomada en menos de 5 minutos.

- Los competidores se tomaron la Pikantus 'fondo blanco' y terminaron al mismo tiempo. Al ver que el estado de los dos era igual de deplorable, se declaró un empate técnico entre los enfrentados.

miércoles, 10 de septiembre de 2008

Fabulosos Cadillacs

¡Está todo para el orto!

La cuenta regresiva llegó a su fin: Los Fabulosos Cadillacs volvieron a tocar juntos en un escenario el pasado 1 de julio en un “secret show” (cuya ubicación se reveló ese mismo día a las 0 hs) en los alrededores del Planetario de la Ciudad de Buenos Aires, frente a más de 15 mil personas.

El ‘desprejuicio’ puede venir, según la canción, puede venir cualquier cosa o simplemente el filtro sea lo que nos gusta y lo que no nos gusta. También estamos en un proceso que empezó hace relativamente poco. Estamos ensayando juntos desde el 7 de abril, que no es mucho tiempo para un disco normal nuestro. Entonces, lo interesante es que ya estamos dentro del sí o sí, ¡qué carajo! Lo que sobra es arte, eso es seguro. No hemos encontrado un estilo en las canciones, como para decirles que estamos más pa’ ca que allá. Creo que estamos en los cuatro puntos cardinales.

La banda grabará un álbum en agosto con canciones nuevas y versiones actuales de temas clásicos de su repertorio. Llegará al público en octubre. Recientemente, Sony BMG reeditó toda la discografía de LFC remasterizada en Sterling Sound, NYC, con sus portadas originales adaptadas a formato de colección.

Creadores de éxitos como Vasos vacíos, Matador, Demasiada presión y Mal bicho la suya definitivamente es una de las bandas más célebres del rock en español.25 años de trayectoria, 11 álbumes de estudio, sin contar recopilaciones y ediciones en vivo (Bares y fondas, Yo te avisé, El ritmo mundial, El Satánico Dr. Cadillac, Volumen 5, Sopa de caracol, El león, Vasos vacíos, Rey Azúcar, Fabulosos Calavera y La marcha del golazo solitario), múltiples discos de oro y platino (incluyendo un galardón de Séptuple platino), casi 3 millones de discos vendidos y más de 1.200 shows presentados alrededor del mundo.
Cuentan en su haber con premios Grammy (fueron la primera banda que ganó la categoría Best Latin Rock/Alternative Performance, creada en 1998), MTv, Billboard, Ascap, Gardel, Ace, Ace de Oro y Sony Music al millón de discos vendidos.

miércoles, 3 de septiembre de 2008

fingiendo orgasmos

Esos manes que empiezan a preguntar ¿ya te viniste? son los culpables de que uno diga, bueno, listo, ya me vine. Termina tú y deja de joder

Las mujeres fingimos todo. Nuestra obsesión por fingir comienza justo cuando salimos por primera vez con un tipo. Nos hacemos las rumberas, las que nos gusta el baile y la parranda y el trago, y después de unos meses, comenzamos a quitarnos la máscara y a pedirle que nos quedemos en la casa. Luego revelamos nuestra verdadera personalidad y si el pobrecito sale un día de rumba, nosotras, las que antes éramos tolerantes, nos volvemos unas criminales en potencia.

También fingimos el llanto. Podemos llorar justo cuando es necesario para evitar una pelea o para desviar la atención sobre un tema espinoso. Pero lo que más sabemos fingir son los orgasmos. Cualquier mujer que se respete ha fingido, por lo menos, uno.

¿Por qué finge un orgasmo una mujer? Pues yo, por lo menos, lo he hecho por puro aburrimiento, básicamente. Esos manes que, mientras están tirando empiezan a preguntar ¿ya te viniste? ¿te falta mucho? son los culpables de que uno diga, bueno, listo, ya me vine. Termina tú y deja de joder.

Hay algunas, es cierto, que fingen orgasmos por amables. Para que el tipo se sienta bien. Normalmente estas mujeres se caracterizan por ser sometidas, silenciosas en la cama, por no saber decir qué quieren y por ser malos polvos.

Yo, particularmente, no finjo un orgasmo hace muchos años. Si no pasa, digo que no pasó y ya está. Ya me aburrí de fingir gemidos. Si el tipo comienza a preguntar le digo simplemente que no. Que no me he venido. Que espere y que no me presione. Si no aguanta, para eso está la repetición.

Los hombres, sin embargo, también fingen orgasmos, algunos de ellos con una frecuencia inusitada. Es evidente que los hombres dejan una huella física cuando tienen un orgasmo, así que no es tan fácil como para las mujeres (aunque nosotras también dejamos huellas físicas, que muchos no saben leer todavía).

Sin embargo, gracias al uso del condón, es mucho más fácil fingir un orgasmo. Lo hacen de la misma forma que las mujeres, con gritos y "qué rico", pero lo hacen por razones un poco diferentes.

Un hombre suele fingir un orgasmo frente a una mujer que no lo deja descansar. Ella va por el tercer polvo, feliz, y él, pobrecito, está molido y quiere irse a dormir, así que se excita, pasa bien, pero no se viene, está mamado y ya no da más. Se hace el que se viene, se para, se quita el condón y chao, a la cama.

¿Qué mujer va a tomarse el trabajo de mirar un condón? Yo, por lo menos, no. Ni se me ocurriría. Quién sabe entonces si todos los tipos se han venido siempre conmigo o no. Yo no me calificaría como demasiado intensa, ya saben, no me gustan los terceros polvos. Y también sé qué exigirle a quién, dependiendo de la edad y del estado físico.

Sin embargo, si me enterara de que alguno de ellos ha fingido un orgasmo, seguro que me molestaría. Me sentiría engañada, como si me hubieran dicho mentiras. Y como me molestaría darme cuenta saber que finge, evito hacerlo yo misma. Así que soy sincera, por lo menos en la cama.

*sexo -Historias de vampiros



Yo siempre he dicho que el sexo no tiene por qué ser limpio. El acto sexual está lleno de fluidos, secreciones y olores, y al que no le gusten es porque no puede disfrutar plenamente del sexo.


El beso negro implica meter la lengua en el ano, por ejemplo, y resulta muy placentero tanto darlo como recibirlo. Igual ocurre con el sexo oral: tragarse el semen, aunque no es rico, y beberse las secreciones de una mujer, son parte del disfrute de ambos.


Pero existe algo a lo que yo sí le tengo aversión, aunque suene a retrógrada, y es acostarme con alguien cuando tengo la regla.


La primera y única vez que lo hice era muy joven y el recuerdo de haber perdido la virginidad estaba todavía fresco. Mi novio me convenció de que era la forma más segura de hacerlo (un concepto que se ha revaluado) y así fue que terminamos tirando en esas poco estéticas circunstancias.


Cuando terminamos, su semen se mezclaba con mi sangre y todo parecía como la escena de una masacre. Las sábanas quedaron manchadas, mis piernas también y su pene, bueno, su pene se parecía al de John Bobbit, recién cercenado. Era francamente horrible.


Ahí abandoné la idea de seguir experimentando con eso y me dediqué a disfrutar los 25 días al mes que podía hacerlo, y a negarme rotundamente los otros cinco días restantes.


Pero hace poco descubrí que no todas las mujeres somos así. El otro día estaba conversando con una amiga que me contaba que la primera vez que se acostó con su novio, ella tenía la regla.


Para rematar la historia, ni siquiera habían salido durante mucho tiempo, o sea que ni confianza se tenían. Se acababan de conocer en un paseo por Europa. Él era italiano y ella colombiana, y él estaba viajando un poco antes de ir a vivir a Japón, donde tenía un trabajo con una ONG. Ella, en cambio, se iba a vivir a Buenos Aires. Las posibilidades de que se encontraran de nuevo eran ínfimas, y fue amor a primera vista, así que la noche antes de separarse, hicieron el amor en un hotel desvencijado en Barcelona.


Por circunstancias de la vida, él vino a América Latina, se fue a vivir a Chile y ella terminó visitándolo con frecuencia. A ninguno de los dos parecía importarle el hecho de que a veces tenían que tener sexo con sangre de por medio, y mi amiga no lo veía ni problemático ni fastidioso.



"Qué importa, si la sangre no huele", me había dicho mi amiga. Sin embargo, sí es escandalosa, mancha y es poco estética.


Yo hice lo que hago con frecuencia cuando encuentro sorpresas así, que es hacer una encuesta, y descubrí que la mayoría de mis amigas lo consideran casi un pecado, mientras que la mayoría de mis amigos piensan que es normal. ¿Por qué será eso? A nosotras nos molesta que nos toquen y a ustedes (a muchos) les parece parte de la naturaleza y como tal lo asumen.


¿Será que en eso ustedes son más civilizados? ¿Menos aseados? El sexo, por supuesto, no tiene por qué ser aséptico, pero sí tiene que tener un límite, y para mí tener sexo con la regla es traspasar cualquier frontera del pudor.